José Ignacio Quemada, psiquiatra y director de la Red Menni de Daño Cerebral, habló en la I Jornada de Bioética que se celebró en Valladolid sobre la importancia de esta disciplina a la hora de determinar si una persona con daño cerebral tiene capacidad de decidir por sí misma.
Cuando una persona sufre daño cerebral – bien sea debido a un ictus, un TCE u a otras causas, como tumores o encefalitis-, puede verse afectado su nivel de alerta, su control motor, sus procesos de comunicación, de cognición, e incluso sus emociones y su personalidad. El doctor Quemada expuso las herramientas y principios que marcan el proceso de valoración de la capacidad de decisión en pacientes con una lesión cerebral severa. Es decir, explicó sobre cómo se dictamina si un paciente con daño cerebral tiene conocimiento y voluntad para entender los actos que realiza y para querer realizarlos.
Es habitual que alguien con daño cerebral tenga que tomar decisiones importantes, como conducir, trabajar, hacer testamento, vender una casa, divorciarse, votar… La valoración de la capacidad de decidir ha de tener en cuenta su capacidad de elegir, la comprensión de las cuestiones, el manejo racional de la información, etc. José Ignacio Quemada abundó sobre la conciencia y sus trastornos. También abordó diversos problemas éticos y, en cuanto a las decisiones de los pacientes, remarcó que la determinación de la competencia debe relacionarse con cada decisión concreta.
- Los procesos que subyacen al juicio y a la conducta social van más allá de la valoración cognitiva clásica.
- La valoración funcional en entornos reales es de gran utilidad.
- En la valoración de la capacidad de decidir se debe tener en cuenta la complejidad de la decisión.
- Los problemas de la comunicación requieren la valoración de un especialista para analizar el nivel de comprensión y, si es precisa, la utilización de sistemas alternativos de la comunicación.
El encuentro
Organizado por el Centro Hospitalario Benito Menni de Valladolid, este primer encuentro sobre bioética, celebrado el pasado viernes día 30, estuvo dirigido a profesionales sanitarios y sociosanitarios, asociaciones de familiares y enfermos, y, en general, todas las personas interesadas en la materia. Como puede verse en el folleto, en esta jornada participaron otros ponentes de gran talla que desarrollaron otros temas de interés.
La bioética es un campo de reflexión que promueve el desarrollo de valores humanos en el plano profesional. Como disciplina, ayuda a los profesionales de nuestros centros a alcanzar la excelencia en su práctica clínica. La atención a personas con necesidades de salud, psicológicas, sociales, espirituales, hace necesaria y fundamental la incorporación de estos valores. Debemos estar preparados para ayudar a las personas en situaciones de fragilidad a ejercer su autonomía, a tomar las decisiones que más se adapten a propio proyecto vital. Tenemos que acompañarles para que se sientan seguras, y poner a su disposición nuestros saberes y esfuerzos para que hagan uso de su capacidad.