Naiara Mimentza, neuropsicóloga de la Unidad de Daño Cerebral del Hospital Aita Menni, cuenta en la Cadena Ser cómo podemos prevenir el ictus y cuáles son sus secuelas, subrayando la atención que merecen aquellas consecuencias psíquicas del DCA, a menudo olvidadas.
El ictus es la primera causa de discapacidad en España y lo padecen entre 500 y 600 personas por cada 100.000 habitantes. En el Servicio de Daño Cerebral del Hospital Aita Menni y en toda la Red Menni de Daño Cerebral de Hermanas Hospitalarias sabemos muy bien que un ictus o accidente cerebrovascular implica un curso de enfermedad muy definido, cuya focalidad neurológica más habitual afecta a la pérdida de fuerza en un hemicuerpo, la pérdida del habla, la alteración de la conciencia o la disfunción sensorial o sensitiva. También sabemos que, cuando se habla de consecuencias de los ictus, a menudo se olvidan los problemas mentales que se derivan de esta patología cerebral. Sin embargo, son precisamente estos problemas en muchas ocasiones cuestión de consulta en nuestros Servicios de Daño Cerebral y la mayor preocupación de muchos de los mensajes que recibimos por parte de familiares y personas cuidadoras.
Por todas estas razones, queremos compartir íntegramente en estas páginas la entrevista que mantuvo en el programa Hoy por Hoy de la Cadena Ser la neuropsicóloga Naiara Mimentza. Nuestra experta subraya que hay que valorar las alteraciones emocionales y de personalidad tras el ictus, y empezar a tratarlas, puesto que estas secuelas se encuentran entre las que mayor impacto generan en la familia.
Esta neuropsicóloga de la Unidad de Daño Cerebral del Hospital Aita Menni ha realizado un estudio sobre las alteraciones psicopatológicas en el ictus que ha servido de base a su reciente tesis doctoral. En la conversación radiofónica, que puede escucharse pinchando sobre la foto superior, la ya doctora en Psicología por la Universidad de Deusto describe los trastornos emocionales y conductuales postictus, entre los que destacan la depresión la ansiedad, la apatía y la irritabilidad, y ofrece algunos consejos para las personas afectadas y sus familias.
* Más información sobre estas alteraciones en el artículo técnico al que lleva este enlace.