Marcos Ríos habló de nuevas formas de evaluación y tratamiento en la sede del CEADAC y en el foro ‘El arte de rehabilitar’. “Si bien las herramientas y medios utilizados han cambiado, los objetivos siguen siendo los mismos: ayudar a la persona a restablecer su vida a través del abordaje integral de los déficits”, afirmó nuestro ponente tras un repaso de la historia y un análisis de las innovaciones en neurorrehabilitación.
La rehabilitación del daño cerebral está en continuo desarrollo; a la creación de servicios multidisciplinares específicos, se une la investigación y la utilización de tecnología concebida para ayudar en los procesos rehabilitadores. Coincidiendo con el Día del Daño Cerebral, el pasado 26 de octubre, el doctor Marcos Ríos habló de ‘Avances en el abordaje del daño cerebral’, de nuevas formas de evaluación y tratamiento, de soluciones robóticas, de técnicas de neuroimagen para ayudar en el diagnóstico y de electroestimulación como terapia innovadora, entre otras cuestiones. El día fue intenso, su intervención tuvo lugar por la mañana en la sede del Centro Estatal de Atención al Daño Cerebral (Ceadac), que le invitó a participar en una jornada para celebrar su 20 aniversario, y por la tarde, en el foro ‘El arte de rehabilitar’, organizado por el Servicio de Daño Cerebral del Centro Hospitalario Benito Menni de Valladolid.
En ambos eventos, Marcos Ríos, neuropsicólogo y coordinador de la Unidad de Daño Cerebral del Hospital Beata María Ana, repasó la historia del tratamiento de daño cerebral adquirido haciendo hincapié en los últimos 20 años y en el presente de la neurorrehabilitación.
El siglo XX trajo un aumento del interés por la rehabilitación, contemplando desde la restauración de los déficits a la compensación, con un enfoque multidimensional y holístico. “Si bien las herramientas y medios utilizados han cambiado, los objetivos siguen siendo los mismos: ayudar a la persona a restablecer su vida a través del abordaje integral de los déficits neuropsicológicos (cognición, emoción y conducta) asociados al daño cerebral”, declaró, para definir a continuación los objetivos de la rehabilitación en una Unidad de Daño Cerebral de la Red Menni como la que coordina en Madrid:
- Asegurar la autonomía personal y favorecer la socialización.
- Favorecer la estimulación de las funciones cognitivas superiores.
- Acompañar a la persona en la toma de conciencia de sus dificultades.
- Acompañar a la persona y a sus allegados en el trabajo de elaborar un nuevo proyecto de vida.
El reentrenamiento de las funciones alteradas; la compensación de las dificultades mediante el entrenamiento en habilidades alternativas, y la sustitución de la función mediante el empleo de ayudas externas conforman los tres principales ejes o estrategias en rehabilitación, según Ríos. De este modo, esquematizando, el propósito del proceso rehabilitador pasa por:
- Mejorar el rendimiento cognitivo.
- Mejorar la capacidad funcional: AVD, independencia.
- Favorecer la inclusión social.
- Promover la inserción laboral.
“Conocemos por las siglas CCCFF -que responden a las iniciales de los ámbitos de los que obtenemos información en la primera evaluación: cognición, conducta, conciencia, funcionalidad y familia- el método que aplicamos en los dispositivos de Hermanas Hospitalarias dedicados de forma monográfica a la rehabilitación del daño cerebral. El éxito de las intervenciones se traduce en una mejoría tras la rehabilitación”, expuso nuestro ponente.
¿El futuro? O ¿el presente?
Técnicas de neuroimágen, herramientas de neurofeedback, estimulación cerebral (TMS y TDCS), robótica, realidad virtual, biometría, integración cerebro-máquina, telerrehabilitación, ayudas técnicas basadas en grandes desarrollos tecnológicos, prehabilitacion, domótica, el aumento del conocimiento disponible, los modelos predictivos… Para explicar la innovación en la rehabilitación del daño cerebral, nada mejor que concretar el entrenamiento específico de una actividad de la vida diaria centrado en la persona y su entorno, como puede ser volver a conducir. En este caso, la Unidad de Daño Cerebral del Hospital Beata María Ana dispone de un simulador de la conducción y propone, si es preciso, las adaptaciones del vehículo. Siempre sin olvidar: qué tipo de paciente es, su estado cognitivo general, su respuesta a las intervenciones, cuál es su grado de accesibilidad a los recursos, en qué fase del proceso rehabilitador nos encontramos, etc.
Marcos Ríos no quiso concluir sin referirse a un condicionamiento muy importante de la rehabilitación del daño cerebral: los recursos económicos. Y es que es preciso el apoyo sociosanitario continuado en forma de atención en centros de día, residencias, pisos supervisados, apoyo al empleo y la ocupación, ayuda domiciliaria y financiación de la adaptación de la vivienda, así como el acceso al ocio y deporte adaptados. “El ahorro en costes de atención continua a largo plazo y supera el elevado coste de la rehabilitación a corto plazo, especialmente en pacientes con un alto grado de dependencia. También acaba aliviando la presión en los servicios de atención aguda. En cualquier caso, los resultados a largo plazo de la rehabilitación son más exitosos donde el apoyo continuo y la supervisión están disponibles”, declaró nuestro experto, citando estudios que también sugieren que los pacientes con lesiones cerebrales de moderadas a graves que recibieron una rehabilitación más intensiva mostraron una mejoría más temprana. Estos mismos estudios apuntan que para las lesiones cerebrales leves la información y el asesoramiento suelen ser más apropiados que la rehabilitación intensiva.
La aportación de Marcos Ríos al foro ‘El arte de rehabilitar’, celebrado esa misma tarde en el Centro Hospitalario Benito Menni de Valladolid -y donde declaró que encuentros oros como es facilitan los procesos de colaboración y coordinación-, se desarrolló en términos parecidos.
Reconocimiento
El CEADAC, el centro de referencia estatal dedicado a la rehabilitación integral e intensiva de personas con daño cerebral adquirido, ha cumplido 20 años. El 26 de octubre, coincidiendo con el Día Daño Cerebral, realizó un acto de entrega de reconocimientos a personas y entidades que han colaborado en estas dos últimas décadas de manera especial con el centro y en la rehabilitación del daño cerebral adquirido. Marcos Ríos Lago fue una de las personas acreedoras de esta distinción. En la foto vemos el momento en el que Inmaculada Gómez Pastor, directora gerente del centro, entrega la placa a nuestro neuropsicólogo.
¡Enhorabuena y gracias al CEADAC! Por muchos años de colaboración.