Estos días de confinamiento en casa para contener la transmisión de la enfermedad COVID-19 pueden ser una oportunidad para instaurar rutinas y buenas prácticas relacionadas con el momento de la comida que nos ayudarán a que los niños y niñas con dificultades puedan aprender a comer mejor. Nuestra logopeda Estefanía Rodríguez nos da algunas pautas y nos anima a ello.
Estefanía Rodríguez Sanz, logopeda de la Unidad de Rehabilitación Infantil del Hospital Beata María Ana, nos explica que es habitual encontrar en nuestras consultas familias que tienen dificultades con la alimentación de sus hijos, porque no consiguen que coman alimentos variados, no consiguen pasar a la masticación… Nuestra experta sugiere que, estos días de confinamiento para contener la enfermedad COVID-19 pueden ser una oportunidad para instaurar hábitos y rutinas relacionados con el momento de la comida. En este vídeo y bajo estás líneas nos deja algunas ideas para poner en práctica estos días en casa. ¡No dejéis de hacerle caso!
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- Sentarse a la mesa con las personas adultas. Así verá cómo comen los mayores de la casa, lo que disfrutan y se podrá interesar por su comida.
- Hacer platos atractivos, no hace falta ser un súper chef, pero hacer los platos divertidos o visualmente atractivos ayuda. ¡Cuántas veces no tenemos hambre para al ver algo con muy buena pinta nos empiezan a entrar ganas de comer!
- Ayudar en la cocina, hacer la lista de la compra y colaborar a la hora de colocar los alimentos en la nevera o a poner y quitar la mesa, son tareas que hacen que el niño o niña forme parte del momento de la comida. Ademas le ayuda a conocer los alimentos y su preparación. Y quién no nos dice que entretanto quiere probar algo, olerlo…
- Prepararse para el momento de la comida, anticipar con tiempo, avisar al resto de la familia, lavarse las manos, sentarse a la mesa, ponerse el babero… contribuye a que el peque acabe una actividad y se prepare para la siguiente.
- Jugar con la comida, a las cocinitas, a transportar la comida con los camiones, a hacer la compra… le ayudará a practicar lo que está aprendiendo y a ver la comida desde otro punto de vista. Podéis observar qué hace y a lo mejor os da una pista de cómo vive el momento de la comida.
- Promover que vuestro hijo o hija coma solo, con las manos o los utensilios; no nos vamos a preocupar mucho ahora por si se mancha. Esto favorece la autonomía y la autogestión.
- Introducir los alimentos nuevos en muy poca cantidad al principio y respetad el ritmo que tiene el niño, si quiere probar más o no, si sólo quiere cogerlo pero no probarlo…
- Hay días que tiene más hambre y otros menos, como nos pasa a todos. Hay que intentar limitar el picoteo, que hace que luego tenga menos apetito a la hora de comer e intentar llevar una rutina de horario.
- También es interesante disminuir los distractores: la tele, la tablet… Para todos, hay que ser un buen ejemplo, y favorecer la conversación en familia y el el hecho de centranrnos en lo que se está haciendo.
- No enfadarnos y tener paciencia, los cambios a veces son lentos. Observad esos pequeños cambios que son importantes: toca un alimento nuevo, lo huele, pregunta por lo que coméis, quiere ayudar en casa…
Esperamos que estos os ayude. Contadnos qué tal os ha ido y cualquier duda o anécdota no dudéis en trasnmitírnosla. Podéis hacerlo por medio de nuestro email: erodriguezs.hbma@hospitalarias.es