Las vacaciones, la vuelta al cole o halloween, cualquier excusa es buena para organizar una fiesta. En los talleres grupales los niños perciben que hay otros pequeños que van a terapia y poder compartir con ellos sesiones de forma amena y distendida resulta enriquecedor para ellos.
Comienza el nuevo curso y los pequeños de la Unidad de Rehabilitación Infantojuvenil del Centro Hospitalario Benito Menni de Valladolid reanudan sus tratamientos con las pilas bien cargadas tras las merecidas vacaciones.
Todos regresan a sus programas contentos porque saben que trabajando van a progresar y que hay otros niños y niñas que también asisten a la Unidad. Se conocen entre sí gracias a las sesiones de terapia en grupo que periódicamente organizan los terapeutas de la Unidad. La última de ellas fue un taller de verano.
En esta ocasión, al igual que en otras jornadas, los terapeutas organizaron actividades en búsqueda de objetivos comunes. Durante tres horas, repartidas en un taller de cocina de terapia ocupacional y en un taller conjunto de neuropsicología y logopedia, todos celebraron las vacaciones.
La colaboración fue excelente. Para terminar esta sesión tan especial se entregaron diplomas de asistencia y medallas a los chicos que mejor trabajo realizaron. Otra de las actividades en la que los niños de la Unidad participan con cierta frecuencia es una especie de “juego de la oca” que la logopeda Patricia Murciego Rubio les ha preparado utilizando las baldosas del suelo como casillas.
Y habrá muchas más actividades grupales. El equipo terapéutico de la Unidad ha comprobado que la organización periódica de un día de terapia en grupo con carácter lúdico resulta altamente motivante para los niños y también para los terapeutas y los padres.