¡Que estar en casa no sea un impedimento para seguir haciendo ejercicio físico! Nuestro fisioterapeuta Jorge Olmo exhorta a las personas con daño cerebral a mantenerse en forma durante el confinamiento. Todo son beneficios.
Teniendo en cuenta las circunstancias que estamos viviendo de confinamiento en nuestras casas, las opciones de mantener la actividad a nivel físico pueden verse mermadas. A fin de minimizar el deterioro físico, el fisioterapeuta Jorge Olmo, del Servicio de Daño Cerebral del Hospital Aita Menni, quiere, a través de estas líneas, dar algunos consejos a las personas con lesión cerebral u otro tipo de discapacidad neurológica y a sus familias. Su intención es que sus recomendaciones queden muy claras, así que ha configurado esta lista con las que, en su opinión, son primordiales:
- Las familias deben evitar la sobreprotección de las personas con alteraciones de movilidad, incentivándolas además a realizar con seguridad todo lo que puedan. Es muy importante aplicar las pautas individualizadas de movilidad y manejo facilitadas por los profesionales.
- Los cambios posturales cada 2-3 horas y las movilizaciones pautadas por el fisioterapeuta son muy importantes para las personas con niveles altos de dependencia.
- Para caminar por el domicilio de una manera más segura, se recomienda eliminar todos los obstáculos que puedan derivar en un riesgo de caída, como pueden ser las alfombras.
- Las personas con alteraciones del equilibrio deben utilizar los productos de apoyo prescritos (puntos de apoyo fijos, andadores, bastones, etc) para realizar transferencias y cambios de posición corporal, para mantenerse con seguridad de pie o para caminar. En caso de necesidad, el familiar debe supervisar o asistir en la maniobra aplicando las pautas del fisioterapeuta.
- La actividad física que realicen las personas con alteraciones motoras siempre debe ser adaptada a las capacidades individuales, siendo conveniente consultar al fisioterapeuta cualquier duda.
- A modo de recomendación general, una buena opción son los ejercicios ‘modulares’, ya que son fáciles de ejecutar, seguros y no requieren de mucho espacio para realizarlos. Algunos ejemplos de estos ejercicios son: bicicleta estática, steeper, elíptica, pedalier (brazos/piernas) o cinta de marcha. Cuando se esté haciendo el ejercicio hay que evitar cualquier riesgo de caída, no debe aparecer dolor, fatiga ni sensación de mareo. Se debe prestar supervisión, especialmente, a las personas con alteraciones cognitivas y/o conductuales.
- La realidad virtual es otra opción muy divertida de hacer una amplia gama de ejercicios y actividades físicas en casa. Para ello hay que disponer de dispositivos como la Wii, la Xbox o la Kinect. Recordad que los ejercicios siempre tienen que hacerse en un entorno seguro.
- Para las personas que además sufran ausencias o crisis epilépticas, la recomendación es hacer ejercicios suaves sentados y/o tumbados sobre una esterilla/alfombra o en la cama. Algunos ejemplos pueden ser:
- movimientos activos de extremidades y tronco
- entrenamiento de los volteos
- estiramientos
- ejercicios de tonificación con resistencias bajas
- ejercicios aeróbicos como ‘pedalear’ en decúbito supino o sentada en la silla detrás del pedalier o de la bicicleta estática.
Los beneficios generales que se buscan a través de la actividad física son:
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- Activación del sistema cardiovascular: el ejercicio regular estabiliza la presión arterial, lo que mejora la irrigación sanguínea y reduce la posibilidad de que se produzcan edemas. Un sistema cardiovascular activo mejora la quema de grasas, la glucosa en sangre y la regulación de los niveles colesterolémicos, fundamental para prevenir más accidentes cerebrovasculares.
- Activación del metabolismo: el ejercicio regular activa todos los procesos metabólicos del cuerpo. Esto tiene un efecto positivo en la digestión y en la micción.
- Optimización del sistema respiratorio.
- Mantenimiento de la fuerza muscular.
- Regulación del tono muscular y/o la movilidad.
- Estabilidad mental: el ejercicio regular genera un ánimo positivo.
Para las personas usuarias de sillas de ruedas cobra especial importancia la bipedestación. A ellas, se les aconseja que se pongan de pie, con la ayuda del producto de apoyo que necesiten, varias veces al día y durante el tiempo que lo toleren. Hay que hacer hincapié en la postura, tratando de permanecer de pie con la mejor alineación corporal posible (pies separados de manera que los tobillos estén alineados en los planos frontal y sagital con las rodillas, caderas y hombros) y tratando de cargar el mismo peso sobre ambos pies. Las personas con mayores dificultades de equilibrio necesitarán supervisión o ayuda de otra persona para evitar cualquier riesgo de caída.
También se recomienda el uso regular del bipedestador o de la silla bipedestadora en aquellas personas que lo dispongan en casa, pero siempre teniendo en cuenta las pautas del fisioterapeuta.
Los beneficios de la bipedestación en aquellas personas que pasan muchas horas encamadas o sentadas son múltiples:
- Facilita una postura natural y simétrica, aliviando el dolor derivado de una postura inadecuada.
- Ayuda a prevenir deformidades en columna, pelvis, caderas, rodillas y tobillos.
- Ayuda a inhibir la espasticidad de las extremidades inferiores.
- Ayuda a reducir contracturas musculares.
- Ayuda a gestionar la atrofia muscular del tronco y extremidades inferiores.
- Ayuda a mejorar la extensión del tronco y de las extremidades inferiores.
- Ayuda a promover un desarrollo músculo-esquelético adecuado.
- Favorece el desarrollo óseo y ralentiza la osteoporosis.
- Ayuda a disminuir la incidencia de úlceras por presión.
- Ayuda a normalizar la función intestinal (prevención del estreñimiento).
- Ayuda a mejorar la función renal y de la vejiga (prevención de infecciones urinarias).
- Ayuda a regular la presión arterial, la circulación sanguínea y facilita la respiración (incrementando las posibilidades de expulsar secreciones de las vías respiratorias). Todo ello proporciona una mayor resistencia y tolerancia a la verticalidad, cuestión muy importante, sobre todo, para los usuarios con altos niveles de dependencia.
- Ayuda a reducir el edema de extremidades inferiores.
Nuestro fisioterapeuta quiere finalizar con una sabia cita:
“La calidad no es un acto, sino un hábito”, Aristóteles