Junto con Hiru Hamabi, damos a conocer las consecuencias del daño cerebral infantil y su tratamiento a profesores de Primaria
La doctora Beatriz Gavilán, neuropsicóloga referente de la Unidad de Rehabilitación Infantil del Hospital Beata María Ana, se acercó hasta un conocido colegio de Madrid, junto con representantes de la asociación Hiru Hamabi, para hablar de la importancia de abordar el DCA en niños y jóvenes desde una concepción global, mediante la aplicación de programas de rehabilitación transdisciplinar. También incidió en la necesidad de contar siempre con la familia y, por supuesto, con el colegio. “El colegio es el entorno donde los niños aprenden a socializarse, donde de hecho se socializan”, subraya nuestra experta.
El Colegio ‘El Valle’ Valdebernardo (Madrid) reunió en torno a nuestra ponente a 23 profesores de Primaria. El centro se mostró especialmente interesado en entender las consecuencias derivadas del daño cerebral adquirido en alguien en pleno desarrollo, ya que cuenta con una alumna con DCA a quien trata de ayudar lo más posible.
¿Qué ocurre cuando se produce una lesión cerebral? ¿Qué repercusión tiene en el aprendizaje? Durante su intervención, la neuropsicóloga destacó que las secuelas pueden ser múltiples y pueden afectar no solo a aspectos motores, sino también a funciones cognitivas, que provocan dificultades de concentración, problemas para atender, recordar, hablar, controlar impulsos y enfados, entender o jugar en el patio con los demás. En definitiva, que el daño cerebral constituye un obstáculo para que el niño o niña desarrolle unas habilidades sociales, personales y de autonomía al nivel que cabría esperar a su edad.
Seguimiento y colaboración
“No siempre el daño cerebral es tan visible como en un principio se cree; hay muchos niños que no tienen dificultades motoras ni del lenguaje, lo cual hace que en muchos casos el DCA pase desapercibido”. Y las consecuencias se producen en el plano académico pero también a nivel social y emocional, explicó Beatriz Gavilán. Por ello es tan importante la colaboración, el seguimiento y la coordinación de todos los profesionales y de todos los ámbitos de participación del niño o niña con una lesión cerebral.