El “shaping”, o moldeamiento, es un entrenamiento orientado a tareas adaptadas y actividades repetitivas. Su práctica se desarrolla en pequeños pasos y va aumentando progresivamente su dificultad.
Actualmente, sabemos que, para mejorar las capacidades sensorio-motoras tras un daño cerebral, es necesario realizar cientos de repeticiones con el fin de integrar y aprender un movimiento nuevo en nuestro repertorio de movimientos. Desde la Unidad de Daño Cerebral de Hermanas Hospitalarias Valencia queremos compartir una de las herramientas que nos pueden ayudar a conseguir este objetivo: el shaping.
El shaping es una herramienta basada en el entrenamiento comportamental que conlleva un gran número de repeticiones de una acción o movimiento específico, valorando en todo momento la calidad de la realización de la tarea. Se basa en realizar una tarea muy sencilla, sin gran cantidad de pasos a seguir, enfocados a un movimiento o una acción en concreto.
Esta tarea que aparece en las imágenes, consiste en coger 10 dados y llevarlos al final de la mesa sobrepasando la tira de esparadrapo. En esta tarea, nos centraremos sobre todo en el estiramiento del codo. Realizaremos 10 veces esta tarea. Al conseguir aproximadamente unas 10 repeticiones por cada intento, al acabar por completo con este ejercicio, es decir, al acabar los 10 intentos habremos conseguido al menos unas 100 repeticiones del movimiento que deseamos buscar en apenas unos 20 minutos. Además, siempre obteniendo un feedback constante que obtenemos al valorar la calidad de cada intento, promoviendo la sensación de autoeficacia de la persona.
Este tipo de práctica masiva es una de las herramientas que utilizamos tanto en nuestros protocolos de terapias intensivas como de terapia de restricción del lado sano (CIMT).