Castillo Morales es un concepto de rehabilitación neurológica destinado a bebés, niños y adultos con alteraciones del sistema nervioso central o periférico, de distintas etiologías, congénitas o adquiridas. El doctor Rodolfo Castillo Morales relacionó el neurodesarrollo con la vida intraútero, lo cual permitió abordar al individuo de manera “integral”, es decir, interrelacionando el sistema postural con el complejo orofacial y posteriormente con la visión.
Es muy difícil resumir toda una filosofía terapéutica como la que aglutina Castillo Morales, cuya forma de trabajo está basada en las comunidades aborígenes y sus raíces antropológicas. Gabriela Foroni y Federico Actis, los maestros que impartieron en nuestros centros el curso de introducción al concepto, nos ofrecen aquí una amplia visión. Este enfoque posee bases anatomofuncionales, neurofisiológicas, filosóficas, pedagógicas y ecológicas.
Es importante destacar que NO se trabaja con recetas terapéuticas sino que se elaboran y planifican tratamientos acordes a las necesidades REALES, con acompañamiento a la FAMILIA y respetando su propia BIOGRAFÍA, recalcan Foroni y Actis.
¿Podemos decir que Castillo Morales aplica estimulación manual de la musculatura de todo el cuerpo y del área orofacial? ¿Con qué objetivo y qué beneficios conlleva?
Sí, se realizan estimulaciones manuales de distintas zonas motoras, usando recursos técnicos que identifican al Concepto como lo son la vibración, tracción, tacto, presión y dezlizamiento, usando etapas intermedias (del neurodesarrollo) e impulsos distales, buscando la activación de procesos neuromusculares que favorezcan la comunicación, los desplazamientos independientes y el juego, por citar los más importantes.
Cuando los patrones de sensomotricidad no están en la forma óptima o presentan anomalías, se utilizan zonas motoras corporales que puedan potenciar una actividad más fácil (económica) y de esta forma posibilitar las funciones y autonomías que mejoren la calidad de vida de la persona afectada y su familia.
Entre sus particularidades, el concepto Castillo Morales entiende la alimentación como actividad comunicativa y es conocido por la utilización de placas palatinas. ¿Cuáles son las razones?
Considera a la alimentación no solo como base de la comunicación, sino también de una independencia futura. Donde el vínculo entablado con su madre (desde la vida intrauterina) va a permitir en la vida postnatal el placer a través del contacto, con su cuerpo y con la boca, generando los primeros códigos de comunicación (placer-saciedad/displacer-hambre). Los códigos continúan ampliándose en la medida en que el medio favorece: a través de la oferta, la consulta, la posibilidad de elección… asociados al neurodesarrollo y las diferentes etapas de activación de grupos musculares (en relación al sistema corporal) que favorecen la articulación de sonidos del habla.
El uso de placas palatinas es amplio, tanto en el desarrollo del habla (con estimuladores móviles: perlas) como en la activación del mecanismo buccinador y la postura lingual (estimuladores linguales y vestibulares). Se usa en niños con síndrome de Down, Moebius, en parálisis faciales…
Siempre en busca de una evolución normal, ¿a qué tipo de pacientes se aplican con mayor éxito las técnicas del concepto?
Si hay una lesión definida no se puede hablar de normalidad. Con la aplicación del Concepto no se obtiene la cura, sí se puede llegar hasta una funcionalidad óptima de un 90–95% de recuperación en los mejores casos. Esto es conocido por la neuroplasticidad de sistema nervioso. En general se aplica a personas que presenten alteraciones neuromotoras de distinta etiología, como por ejemplo: parálisis cerebral en todas sus presentaciones, accidentes cerebrovasculares, enfermedades degenerativas, politraumatismos con secuelas, lesiones medulares, síndromes genéticos, metabólicos y adquiridos.
La forma de trabajo se extiende entre diversos profesionales y de distintas disciplinas: fisioterapeutas, logopedas, terapeutas ocupacionales, médicos rehabilitadores… ¿Por qué?
Justamente, por su abordaje integral. Cada área va a respetar el “hacer propio” pero va a conocer sobre el total funcionamiento para poder realizar las consultas y/o derivaciones pertinentes. Por ello en la formación, los cursos son dados, por lo menos, por dos profesionales de diferente áreas, con título de maestro en el Concepto Castillo Morales, ya que consideramos que esta es la única manera de poder “preservar y transmitir” un Concepto sin alterarlo.