Dos veces por semana practican con sus amigos de Fekoor. Acudir a las competiciones oficiales es su mayor ilusión
Lunes y miércoles, de 6 a 8 de la tarde, los chicos de la Agrupación Deportiva Aita Menni (ADAM) que juegan a boccia tienen un plan: entrenar en el polideportivo de San Inazio (Bilbao) con sus compañeros. Son José María Gómez, José Ramón Orozco, Iñaki Mentxaka, Jose Ángel Rodriguez y Diego Lastra, que compiten con el apoyo de Fekoor (Federación Coordinadora de Personas con Discapacidad Física de Bizkaia), y Txema Abad, Carlos Keller, Javi Díaz, Jon Markaida y Angel Batis, que juegan bajo los colores de ADAM desde que se constituyó la entidad. Todos forman una pequeña gran familia gracias a este deporte.
Siempre se han tomado la boccia muy en serio pero acuden más ilusionados a cada entrenamiento desde que Carlos, Javi, Jose Mª y Jon se clasificaran para el Campeonato Interautonómico celebrado en Pamplona el pasado mes de enero. Los tres primeros compiten en la categoría BC2 (tiran con la mano) y Jon en la BC3 (se ayuda de la canaleta). Ninguno de ellos pudo reunir los puntos suficientes para acudir al Campeonato de España, sin embargo todos siguen mirando con optimismo el horizonte.
Ganas de ganar
A la espera de nuevas oportunidades, acarician la idea de participar en algún torneo amistoso que previsiblemente organizará la Federación de Bizkaia de Deporte Adaptado, según nos cuenta Carlos Cañete, uno de sus técnicos. Como para todos los deportistas, para los nuestros las competiciones también constituyen un gran aliciente. La rivalidad les ayuda a mejorar, hace que se sientan más valorados. “Tienen ganas de ganar. Disfrutan cada partida de boccia. Comprometerse es bueno para ellos, es bueno que tengan unos objetivos, salir de casa, de la rutina, relacionarse”, añade Cañete.
La boccia les aporta algo más que ocio. Y desde luego se esfuerzan mucho. Junto con sus monitores (Gabino Iglesias, Sheila Alonso, Onelia Díez), pasan dos tardes por semana lanzando bolas, cambiando impresiones y bromeando. El tiempo de entrenamiento se queda escaso, sobre todos para quienes se desplazan desde el Hospital San Juan de Dios de Santurzi o utilizan el mismo transporte especial. Tienen que regresar al hospital para la hora de la cena así que enseguida viene a recogerles el chófer que los acerca cuando hay entrenamiento hasta las instalaciones municipales. El grupo se despide hasta el próximo día. Los chicos de boccia comparten muy buenos ratos en la cancha, sólo hay que ver las fotos.
No lo tienen fácil pero, por fortuna, cada vez es más habitual ver a personas con discapacidad en todos los ámbitos, y la actividad físico-deportiva comienza a formar parte de sus agendas. La Agrupación Deportiva Aita Menni promociona el deporte adaptado también mediante otras disciplinas deportivas aptas para personas con daño cerebral, como la natación y el ciclismo adaptado. Una excelente labor en la que deportistas y monitores están muy implicados.