El Centro de Referencia Estatal de Atención al Daño Cerebral, CEADAC, reunió el pasado día 21 de junio a quienes integran la comisión que va a revisar la primera edición del ‘Modelo de atención a las personas con daño cerebral’. Este documento técnico vio la luz en febrero de 2007 como parte de la política del IMSERSO de creación de modelos de referencia que articularan la respuesta asistencial a personas con problemáticas crónicas de salud. Su redacción coincidió con la promulgación de la ‘Ley de promoción de la autonomía personal y atención a las personas en situación de dependencia’ y con la puesta en marcha del CEADAC.
Esta primera comisión fue coordinada por el director de la Red Menni de Servicios de Daño Cerebral de Hermanas Hospitalarias, el doctor José Ignacio Quemada, e integró a los doctores Inmaculada Bori, como representante de la Sociedad Española de Rehabilitación y Medicina Física,SERMEF; Luis Gangoiti, del CEADAC, y Juan Marín, del Hospital Aita Menni, además de a María Jesús Ruiz, coordinadora del Centro de día ADACEN de Pamplona, en representación de FEDACE.
Al igual que hace 12 años, el nuevo ‘Modelo de atención a las personas con DCA’ pretende promover modelos de atención de los servicios y prestaciones del Sistema de calidad y eficacia en todos los territorios del Estado, convirtiéndose en un instrumento de ayuda para profesionales y agentes que intervienen en el diseño de políticas y la prestación de servicios a las personas con daño cerebral. Para la primera revisión de este documento, la gerente del CEADAC, la doctora Inmaculada Gómez Pastor, ha vuelto a invitar al director de la Red Menni, José Ignacio Quemada. El neuropsicólogo y coordinador de la Unidad de Daño Cerebral del Hospital Beata María Ana, Marcos Ríos, también forma parte de esta comisión, junto con Isabel Chavarría, como representante de la SERMEF, y Francisco Fernández Nistal, gerente de ADACEN.
Tal y como informa el CEADAC en su web, este documento técnico “constituye un instrumento importante para alcanzar modelos de atención normalizados en el conjunto del Estado para así contribuir a la equidad interterritorial y a la mejora de la cohesión social al impulsar que las personas en situación de dependencia y sus familias reciban unos servicios en condiciones de igualdad efectiva en todos los territorios del Estado. Su actualización responde al compromiso de revisión presentado en el primer informe así como a la aplicación de nuevas experiencias y conocimientos adquiridos a lo largo de la última década en materia de daño cerebral”.