Markel Irizar, Haimar Zubeldia y Joseba Zubeldia dejaron un mensaje de optimismo y vitalidad
En pantalla aparecía la foto de un ciclista malhumorado. “Ahí estoy enfadado. Porque ¿quién no ha tenido un mal día? Todos tenemos días malos.” Con una actitud cercana y frases como ésta Joseba Zubeldia y su hermano Haimar Zubeldia, acompañados de otro grande de la bici: Markel Irizar, se metieron en el bolsillo a usuarios y personal del Centro de Día de Daño Cerebral Aita Menni de Donostia.
Estupendas fotos de sus carreras deportivas, de fondo, sirvieron de guía a una distendida conversación. Los tres deportistas fueron respondiendo a las preguntas realizadas por muchos de los presentes. Algunas, profesionales, como por ejemplo, ¿cómo se preparan para correr en la montaña? Ellos explicaron que trasladándose a los centros específicos situados a gran altura y también durmiendo o pasando mucho tiempo en tiendas de campaña que simulan un empobrecimiento de oxígeno en el aire igual al de la altura deseada.
Nuevos estímulos
Pero también hubo cuestiones más personales, dirigidas a saber por qué Haimar y Markel dejaron el equipo Euskaltel-Euskadi (ahora ambos corren con el equipo estadounidense Trek Factory Racing) o a conocer su opinión sobre la retirada de otro ciclista guipuzcoano, Juanma Gárate. En la primera pregunta ambos coincidieron al responder que cambiar de equipo les proporcionaba nuevos estímulos, de algún modo les rejuvenecía. Respecto al compañero irundarra, explicaron su litigio con su equipo debido a las condiciones laborales.
Foto a foto, pregunta a pregunta fueron saliendo viajes, carreras, abrazos, sonrisas, entrenamientos… y comentarios jocosos, como los emitidos por Estitxu, una de las presentes, quien a través de su SAC (sistema alternativo de comunicación) les soltó: “Lleváis una buena vida y encima sois guapos”. Hubo risas generalizadas y al poco apareció en la tele una foto con Markel Irizar lleno de barro. “Ya veis que no siempre nos damos a la ‘buena vida’, ¿eh?”.
De esta forma tan liviana se habló de tesón y afán de superación; llegar hasta tan arriba (los tres ciclistas han participado en grandes pruebas. Haimar y Markel siguen en activo en la élite y obteniendo buenos puestos en la clasificación de grandes vueltas como la Vuelta a España o el Tour de Francia) requiere mucho esfuerzo. Haimar habló de etapas en la vida, de cambios. Aseguró que su hermano Joseba, que dejó el mundo del ciclismo profesional después de seis años, es tan bueno como ingeniero como él y Markel sobre las dos ruedas.
Para circular en carretera
Antes de salir al Parque Zuatzu a dar un paseo con bicis y triciclos, nuestros visitantes nos dejaron algunas recomendaciones para circular en carretera, entre ellas, no pedalear sin casco ni despistarse: poner en el trayecto todos los sentidos, sobre todo el sentido del oído y no olvidar el sentido común. Así, remarcó Joseba, aun cuando esté permitido circular en grupo y en paralelo, e incluso aunque la bici tenga prioridad, es bueno facilitar las maniobras de adelantamiento a los vehículos a motor en lo posible.
Pasaron muy rápido los minutos junto a estos tres chicos llenos de vitalidad, que de nuestro Centro de Día de Daño Cerebral marchaban a visitar a los niños de la Asociación de Padres de Niños Oncológicos de Gipuzkoa (ASPANOGI). También ayudan a la asociación organizando el Mobibike Eguna.
Esta es su particular contribución, “recordar a las personas con cáncer, con daño cerebral o con cualquier tipo de problema que podemos disfrutar y sonreír”. Con estas palabras se despidieron no sin antes afirmar que ellos aprenden con este tipo de actividades “más que de cualquier otra manera.”
Precisamente fue a través de su amistad con Markel Fernández, hijo de una de nuestras monitoras y uno los niños de ASPANOGI, hoy ya adolescente, como estos tres deportistas llegaron la Centro de Día de Daño Cerebral Aita Menni de Zuatzu para dejar su mensaje. ¡¡Gracias!!
